Aena gana 1.450 millones, un 27% más, por el récord de pasajeros en sus aeropuertos
Aena sigue batiendo récords, en tráfico y en su cuenta de resultados. El gestor aeroportuario ganó 1.450 millones durante los nueve primeros meses de 2024 gracias al incremento de pasajeros, que creció un 10% en España y un 9% sumando Luton y Brasil, y la mejora de los ingresos comerciales. La cotizada mantiene su estimación de que las instalaciones españolas superarán los 300 millones de pasajeros a finales de este año.
El incremento de viajeros tiene un impacto directo en los resultados de Aena. El tráfico en los aeropuertos de España alcanzó los 237,8 millones de pasajeros hasta septiembre. La previsión es que España gestione hasta 306,7 millones en 2024. Si a estas cifras sumamos el tráfico de los aeropuertos de Londres-Luton y la red gestionada por la compañía en Brasil, Aena gestionó 282,5 millones de pasajeros en los nueve primeros meses del año. año.
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Los ingresos de Aena crecieron en los nueve primeros meses del año hasta los 4.400 millones, un 16% respecto al mismo periodo de 2023. Los ingresos por gestión de aviones y pasajeros aumentaron un 14%, hasta los 2.420 millones. El directivo destaca la positiva evolución de la actividad comercial, que ha crecido un 12%.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de los nueve primeros meses fue de 2.660 millones de euros, con un margen del 60%. Esta cifra supone un crecimiento del 26% respecto a 2023 (2.110 millones).
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Aena sigue reduciendo su deuda, aunque todavía es elevada. A cierre de septiembre se situaba en 5.700, frente a los 6.222 millones del año pasado, siendo el ratio deuda financiera neta sobre Ebitda del grupo consolidado de 1,60 veces. El directivo también ha destacado hoy una «sólida» generación de caja, ya que el neto generado por las actividades operativas alcanzó los 2.350 millones.
La cotizada que preside Maurici Lucena reitera hoy que «el fuerte repunte del tráfico, más acusado en los aeropuertos turísticos, hará necesarias más inversiones en infraestructuras, con el objetivo de sincronizar la capacidad con la demanda prevista y, también, de adaptar los aeropuertos a las nuevas requisitos de seguridad y mantener la calidad del servicio”. El próximo plan de ordenación aeroportuaria (DORA III) prevé duplicar las inversiones realizadas en los últimos años.