Sociedad
La voz
Redacción
Patricia Ramírez, madre de Gabriel Cruz, comenzó hace unos días una cruzada contra las series y documentales sobre crímenes reales. Muy afectada, publicó un comunicado en video asegurando que estas producciones estaban siendo «tratando de sacar provecho» de la muerte de su hijo.
En ese mensaje, la madre de «El Pescaíto», asesinado en 2018 por la novia de su padre, Ana Julia Quezadaconvocó una concentración para el sábado 11 de mayo. En pleno Cabo de Gata, en Almería, denunció que un documental o crimen verdadero sobre el caso y pidió que se detengan las grabaciones o incluso la transmisión.
Ramírez aseguró que este programa contaría con el testimonio del asesino del pequeño. Un testimonio que había sido grabado en la prisión de Brieva, en Ávila, donde Quezada cumple su pena de prisión permanente revisable.
Este miércoles, la dirección del centro penitenciario decidió trasladar al interno al módulo de aislamiento cuando se supo que había participado en el documental sobre el crimen. Según informes El objetivo, la decisión se toma por las consecuencias que la noticia puede provocar entre los presos de Brieva. Ahora, en ese módulo, Ana Julia no puede interactuar con otros reclusos ni prácticamente salir de su celda.
La lucha de Patricia Ramírez
Durante la manifestación del sábado, la madre de Gabriel Cruz añadió que en el penal se habían producido «irregularidades» y que sabía por «fuente directa» que la mujer condenada por el asesinato de su hijo Tuvo acceso a un teléfono móvil con el que podía grabar imágenes y audio. con la «complicidad» de ciertos funcionarios y sin permiso de sus superiores.
Ramírez cree que la empresa responsable de ese documental es la misma productora que le ofreció grabar un crimen verdadero sobre el caso de Gabriel hace tres años. Una oferta que los padres del pequeño rechazaron.
«También hemos sabido en estas dos últimas semanas que varios periodistas han podido acceder a ella e incluso hacerle preguntas. avance terminar con esta pieza», añadió Ramírez, quien deshonró que «cualquier medio de comunicación se dignaría darle voz al asesino» de Gabriel Cruz, más aún si hay un consideración económica a pesar de que esto es una excusa para pagar la responsabilidad civil a la que fue condenada, y que asciende a Medio millón de euros.
Ramírez también llamó a detener cualquier tipo de producción con esta temática para evitar que «cualquier asesino» aparezca en televisión y cobre por ello.
Desaparecido
Gabriel Cruz desapareció el 27 de febrero de 2018 cuando pasaba la tarde con su abuela y la pareja de su padre en la finca familiar de La Hortichuelas, en Níjar.
El pequeño, de sólo ocho años, Desapareció en el camino entre la casa de su abuela. y el de otros familiares, que se encontraba a sólo cien metros de distancia.
De inmediato se inició la búsqueda del menor, pero no se supo nada de él durante doce días. Con 3.000 voluntarios y 2.000 profesionales de emergencias, fue la mayor búsqueda de una persona desaparecida en España.
Lo que no se sabía en ese momento era que una de las personas que, al parecer, más estaba sufriendo su ausencia era su asesino. Fue la novia de su padre, Ana Julia Quezada, quien confesó los hechos tras su detención y después de que la Guardia Civil encontrara el cuerpo del niño en el maletero de su coche.
Quezada fue sentenciado en 2019 por asesinato a prisión permanente revisable.