Conmoción en Grecia por el asesinato de una mujer por su expareja en la puerta de una comisaría
Mensajes de condolencia y velas se acumulan en la puerta de la comisaría del suburbio ateniense de Hagios Anaryirios, donde Kyriakí, una joven de 28 años, fue detenida el pasado lunes. brutalmente apuñalado frente a una comisaría por su expareja de 39 años quien, según imágenes de una cámara de seguridad cercana al domicilio de la víctima, la seguía desde hacía días.
Kyriakí había acudido a comisaría en compañía de una amiga para denunciar acosos contra la que había sido su pareja hasta hace dos meses. Según testigos, la joven pidió protección policial para regresar a su casa, a lo que los agentes le dijeron que llamara al Grupo de Acción Rápida para que pusieran una patrulla a su disposición. La joven salió de la comisaría y, mientras hablaba por teléfono con este servicio, su expareja la apuñaló hasta que la mate.
Según un testigo visual que se encontraba en ese momento en la parada de autobús cercana a la comisaría, la joven estaba pidiendo ayuda en ese momento el agresor lo apuñaló y mientras “el guardia estaba a una distancia de 2 o 3 metros y no reaccionó”
«Dama, la patrulla no es un taxi«, el Grupo de Acción Inmediata de la Policía habría respondido a la víctima cuando ésta pidió ser llevada a su casa, según revela la grabación de la conversación telefónica a la que habría tenido acceso el canal de televisión Mega. El agente ha sido destituido de su cargo y está siendo investigado por la policía helénica. Se enfrenta a responsabilidades penales y administrativas.
«La mujer de 28 años debería haber sido salvada», declaró este miércoles el portavoz del Ejecutivo griego, Pavlos Marinakis. El autor del crimen tenía una personalidad violenta y las autoridades griegas lo conocían desde que había sido previamente acusado por lesiones corporales, violencia contra sus empleados, abuso verbal y posesión de drogas. Además de una denuncia de la víctima en 2020 por violación y violencia, que luego fue retirada por la propia joven.
Doble investigación
Además de las investigaciones ordinarias, Marinakis prometió este miércoles que el Gobierno llevará a cabo una investigación exhaustiva para aclarar si la policía siguió todos los protocolos obligatorios en casos de violencia de género. «Es crucial investigar si se siguieron los protocolos, aunque en la vida algunas cuestiones trascienden los protocolos», aclaró Marinakis, quien admitió que en este caso «se podría haber hecho más».
«Era un asesinato premeditado. La habría seguido a su casa y la habría matado allí. «Ella lo tenía todo planeado», explicó el padre de la víctima en una entrevista en la televisión local. «Ha muerto un ángel. Tráela de vuelta, ¿puedes? Entonces hagamos algo para restablecer la pena capital», añadió. Aunque la pareja se había separado hace dos meses, los familiares de la víctima afirman que en el pasado la joven abortó tras recibir una paliza del acusado y que el acusado había estado persiguiendo y acosándola durante varios días.
Otro tema que ha levantado críticas entre la sociedad griega es que el policía que estaba de servicio la noche del trágico suceso formaba parte de una organización criminal que falsificaba documentación, delito por el que estuvo encarcelado durante 12 meses. La Corte Suprema tenía pendiente de tramitar su descalificación del funcionario.
Cambios en el código penal
Los partidos de izquierda pidieron ayer que el feminicidio sea reconocido como un término penal en el código penal griego. A nivel penal, este tipo de delitos se castigan con cadena perpetua, la pena máxima en el derecho penal griego.
Se espera que el imputado declare ante la fiscalía este jueves por las penas de homicidio doloso, tenencia, uso ilegal de armas y suministro y tenencia de estupefacientes.