Dan por muerto a Prigozhin, el dueño de Wagner, en un accidente de avión
Evgeny Prigozhin, el dueño de la compañía de mercenarios Wagner, ha muerto en un accidente de avión registrado en los alrededores de Moscú. Al parecer, el controvertido oligarca se desplazaba en su jet privado entre Moscú y San Petersburgo, su ciudad natal. Al parecer, recientemente había regresado de África, donde había visitado a sus tropas. Por el momento, las causas del accidente se desconocen. En el avión accidentado viajaban otras diez personas cuya identidad también se desconoce.
Prigozhin vivía al límite desde que el 24 de junio protagonizó una sublevación contra Putin. Sus tropas, las mejores preparadas de las que intervienen en la invasión de Ucrania, tomaron la ciudad de Rostov, donde fueron recibidos como héroes. Posteriormente, iniciaron una marcha con blindados hacia la capital, Moscú, y se detuvieron cuando estaban a apenas 300 kilómetros.
Esta sublevación, la más grave vivida en Rusia desde los golpes de Estado contra Gorbachov, se solucionó en el último momento. El presidente ruso, Vladimir Putin, aceptó la mediación del máximo mandatario de Bielorrusia, Alekxandr Lukashenklo, quien consiguió detener la columna. Los detalles de la negociación que han trascendido implicaban que Wagner se instalase en Bielorrusia, ya sus soldados de fortuna, si no estaban implicados en la revuelta, se les ofrecía la oportunidad de incorporarse al Ejército ruso. Las unidades de Wagner desplegadas en África -donde apoyan a dictaduras ya empresas rusas dedicadas a la extracción de materias primas- podrían continuar operando. La Fiscalía, además, anunció que no procesaría a Prigozhin por traición, como pretendía Putin.
Destitución de Surovikin
Gran parte de lo que sucedió durante la sublevación forma parte de los secretos que se manejan en la cúpula del Kremlin. Según señalaron diversos medios, Prigozhin pretendía realmente dar un golpe de estado en el Ministerio de Defensa y arrestar a Serguei Shoigu, el máximo responsable del Ejército ya su mano derecha, Vladimir Gerasimov. El objetivo final de Prigozhin con su rebelión era detener los intentos del Gobierno de Putin de obligar a sus hombres a ingresar en las filas del Ejército regular, lo que en la práctica suponía disolver la compañía de mercernarios.
En una de esas casualidades imposibles que solo parecen suceder en la corte de Putin, la muerte de Prigozhin ha tenido lugar el mismo día en el que se ha destituido de todos sus cargos al general Sergue Surovikin, llamado ‘Armagedón’ por sus brutales práctica en Siria. Surovikin, uno de los principales mandos de la invasión de Ucrania, era un próximo a Prigozhin y se sospecha que era una de las manos negras que apoyaron la rebelión de los merceranios desde las sombras.