Después de unos meses en los que el aceite de oliva ha experimentado sus máximos históricos, la tendencia empieza a cambiar. Y uno de los más favorecidos es el virgen extra, que se encuentra en su nivel más bajo desde julio.
Como se explica agropopular, el mercado del oro líquido ha vuelto a mostrar una tendencia a la baja en origen durante la última semana. Según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en la semana 45 de este año se produjo un descenso en los precios de casi todos los aceites de oliva: virgen extra (-0,06%), virgen (-1,16%), lampante (- 0,36%), refinado (-0,16%).
Asimismo, también descendieron los precios del aceite de oliva crudo (-0,01%) y del aceite de girasol alto oleico (-0,13%). Pero aumentó el valor del aceite de orujo de oliva refinado (+0,41%) y del aceite de girasol refinado convencional (+0,42%).
El virgen extra sigue en declive
De hecho, las cifras de Oleoestepa no mienten: el virgen extra se ha vendido a 7.750 euros la tonelada, el precio más bajo desde mediados de julio. Y en la comparativa semanal, el virgen extra ha bajado unos 100 euros, aunque el virgen no ha variado en los últimos 7 días. El lampante -aceite virgen defectuoso-, por su parte, ha visto reducido su precio en 200 euros respecto a la semana anterior.
Sin embargo, el sistema de información de precios POOlred de la Fundación Olivar sí indica que se han producido descensos generalizados en todas las variedades. Se ha contabilizado que el precio en origen del aceite virgen extra se situó en 7.515 euros la tonelada (un 3,07% menos que la semana anterior), mientras que el aceite virgen se vendió en 6.725 euros la tonelada (-2,48%) y el lampante en 6.250 ( -3,77%).
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