El Parlamento Europeo rechaza la reforma del mercado de carbono

El Parlamento Europeo ha rechazado este miércoles la propuesta de reforma del mercado de emisiones de CO2. El voto en contra de los eurodiputados socialdemócratas y verdes, por una enmienda de los populares, devuelve el texto a la comisión parlamentaria de Medio Ambiente para reelaborarlo.
Así, el intento de cerrar una posición común del parlamento europeo de cara a las negociaciones entre los Veintisiete para impulsar finalmente a nueva política en la UE reducir las emisiones que provocan el cambio climático.
Inconformidad por el plazo de los permisos gratuitos
El denominado sistema ETS, que pone precio al dióxido de carbono emitido por unas 11.000 plantas industriales de alto consumo energético, contempla una serie de Permisos gratuitos de CO2 para que las industrias tengan tiempo de invertir en tecnologías limpias y mantener la competitividad. La razón por la que la propuesta de reforma no ha salido adelante está en durante cuanto tiempo si iba a mantener esa excepción.
El texto aprobado por la Comisión de Medio Ambiente, posición que suele ser respetada por el pleno, siempre que estos permisos se redujeron progresivamente hasta desaparecer en 2030, pero una enmienda presentada por el Partido Popular Europeo, y apoyada por liberales y euroescépticos, ha ampliado hasta 2034 el plazo para la votación de la propuesta.
El cambio ha sido recibido con oposición de los socialdemócratas y los verdes, que han tumbado el texto con 340 votos en contra frente a 265 a favor y 34 abstenciones. Los grupos de extrema derecha e izquierda también han sumado su ‘no’, mientras que una quincena de eurodiputados del bloque mayoritario han votado a solas, como Clara Aguilera y Jonás Fernández, dos socialistas españoles que han optado por el ‘sí’.
Ahora, la propuesta volverá a ser debatida en la comisión de Medio Ambiente y, con un nuevo texto cerrado, volverá a ser sometida a votación del pleno.
Frustrada la posición común del Parlamento para reducir las emisiones
La reforma del sistema ETS es uno de los ocho textos que se votaron este miércoles en la Eurocámara, todos ellos, parte del enorme paquete legislativo «Fit for 55» para que la UE reduzca sus emisiones de CO2 en al menos un 55 % en 2030 en comparación con 2050 como un camino intermedio para lograr la neutralidad climática a mediados de siglo.
Pero al no haber una posición común sobre este punto, el resto de votaciones estrechamente relacionadas se han aplazado, como la del futuro Mecanismo de Ajuste Fronterizo de Carbono (CBAM) para proteger ciertas industrias europeas de estándares ambientales más bajos en terceros países, y la del Fondo Social por el Clima, que preveía usar parte de los ingresos de CO2 para ayudar a los hogares vulnerables en la transición energética.
Entre otros temas pendientes se encuentra el futura ampliación del mercado de emisiones de CO2 al transporte por carretera y la climatización de edificios. Este punto, también conocido como ETS 2, genera dudas entre quienes consideran que encarecería la gasolina y la calefacción en un momento de escasez energética.