Quiso el destino que apenas unas horas después de que Bárbara Rey hablara alto y claro de su romance con el rey Juan Carlos en una entrevista con Santi Acosta, la reina sofía (86 años) ha tenido que afrontar sus compromisos reales.
Con Felipe VI y Letizia a punto de poner rumbo a Italia, doña Sofía se mantiene al frente de la Corona en nuestro país. Este martes, el emérito reapareció en Burgos para la inauguración del ‘Centro de Investigaciones Emiliano Aguirre’, que albergará la memoria documental de la evolución humana.
Con paso firme y una enorme sonrisa, la madre de Felipe VI ha «respondido» a todas las declaraciones de Bárbara Rey. Un testimonio que pronto dio la vuelta al mundo y en el que la ex estrella no dudó en poner el foco en Doña Sofía asegurando que conocía perfectamente las infidelidades del padre de sus hijos.
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Durante toda la visita, la abuela de Leonor y Sofía Parecía especialmente feliz. De hecho, se reía a carcajadas cuando uno de los presentes se apresuró a darle un regalo. Un gesto llamativo que refleja el desinterés que muestra doña Sofía con todo lo relacionado con el rey Juan Carlos. Ya nada le afecta. Mientras en nuestro país se analizan todas y cada una de las declaraciones de Bárbara, la señora Sofía No ha experimentado ningún signo de debilidad y ha estado tan sonriente y tranquila como siempre. Una reacción silenciosa pero poderosa.
Hace unos meses, la experta en realeza Pilar Eyre aseguró que nada de lo que se dice sobre su matrimonio con Don Juan Carlos le duele. «Durante mucho tiempo sólo ha sentido indiferencia hacia su marido y todo lo que él puede hacer. (…) Se muestra segura de sí misma, sabiendo que nadie le va a quitar su papel de reina madre y el cariño del pueblo», confesó en Lecturas.
Y ahora mismo lo que realmente le quita el sueño es la delicada salud de su hermana Irene, que sufre desde hace varios años la ‘enfermedad del olvido’, tiempo durante el cual su estado físico y cognitivo se ha deteriorado notablemente. notable.
La Reina Sofía apuesta por el color tendencia del otoño
Fiel a su estilo clásico, doña Sofía sorprendió en Burgos con un elegante traje de cuadros verde, uno de los colores de la temporada. Un tono que podría responder de forma velada al momento en el que la emérita está a punto de poner fin a un año un tanto convulso para ella.
«El verde transmite calma y tranquilidad. Se asocia con la naturaleza, la prosperidad, la salud y la generosidad (…) Además, tiene un efecto reconstituyente y equilibrante y se dice que armoniza el cuerpo y la mente», afirman. desde el punto de vista psicológico. Valores que pueden definir perfectamente a Doña Sofía.
Volviendo al look, la madre de Felipe VI ha estrenado un conjunto de dos piezas compuesto por chaqueta entallada y pantalón ancho de talle alto. Un conjunto elegante y estilizador que combinó con una blusa, también verde, creando un total look.
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También había un pañuelo a juego, unos botines grises de tacón y un cómodo bolso bandolera de piel que llevaba en la mano. Apasionada de los broches, para hoy elegí un sencillo pin en forma de flor de cuatro pétalos que destacaba en la solapa de la chaqueta.
La Reina Sofía volverá a comparecer este miércoles 11 de diciembre en el Palacio de la Zarzuela. Allí se le entregará el IV Premio de la Asociación ‘Los Pueblos Más Bonitos de España’ «en reconocimiento a su trayectoria a favor de las artes, de los colectivos más desfavorecidos y, especialmente, por el apoyo que siempre ha dado a la Asociación». «
Bárbara Rey habla de la Reina Sofía en su última entrevista
Bárbara Rey ha concedido su entrevista más sincera. Un paso adelante en el que la artista ha dado su versión de todo lo que se había dicho de ella en el último año. «Tengo derecho a que la gente me escuche y sepa cómo soy».lo que pienso y lo que me ha pasado (…) Quiero hacer esto para desmontar todas las mentiras y dejar las cosas más o menos claras», afirmó.
Como no podía ser de otra manera, uno de los temas a tratar fue su romance con el rey Juan Carlos. «lLa reina Sofía sí sabía que estaba conmigo.. Cuando estaba, por ejemplo, en una recepción y en una fiesta de cumpleaños, ella pasaba mucho tiempo conmigo, aparte del saludo y la referencia protocolaria. Me preguntaba por mis hijos.. «Ella sabe mejor que nadie cómo es él», dijo Bárbara.
