«La industria de la moda se trata de personas. Emplea a millones de personas en todo el mundo y todos visten ropa.. «La ropa es lo más parecido a nuestro cuerpo, es nuestra segunda piel» comienza a decir Carolyn Maierun psicólogo cognitivo que creó el departamento de Psicología de la Moda en el London College of Fashion de la Universidad de las Artes de Londres y un programa de maestría allí, en una entrevista con la Asociación Estadounidense de Psicología.
La moda ha sido un sector criticado en algunas ocasiones por su falta de implicación social.algo en lo que los psicólogos pueden ayudar como explica: «Los psicólogos pueden ayudar a resolver los problemas que se sabe que causa la industria de la moda.. Por ejemplo, la industria de la moda tiene mala reputación en términos de responsabilidad social y ahora, y de hecho existe desde hace cuatro décadas, los problemas relacionados con la sostenibilidad están llegando a un punto crítico”. Carolyn Mair no solo se centró en los aspectos sociales en la entrevista, también analizó las tendencias actuales de la moda relacionándolas con la psicología, una de ellas es el porte del bolso bandolera.
Una psicóloga explica qué significa llevar bandolera
«Colocar la bolsa en diagonal proporciona una sensación de seguridad y control, algo que puede influir positivamente en la percepción que el usuario tiene de su entorno», dijo Carolyn Mair en la entrevista para el podcast de la Asociación Estadounidense de Psicología. «A veces se elige proyectar una imagen de confianza y estilo sin tener que sacrificar funcionalidad»explicó el psicólogo.
Esta teoría es reforzada por otros expertos: «La forma en que nos presentamos en público, incluidos accesorios como bolsos, puede comunicar aspectos de nuestra identidad y estado emocional». dice Erving Goffman. «Resuelven y resuelven sin importar si queda bien»argumentó Maryfer Centeno, explicando que Las personas que usan bolsos cruzados son más prácticas.
adicción a las compras
«La forma en que compramos se convierte en un hábito y muchos de nosotros vamos de compras como un placer socialcomo actividad de ocio», respondió Carolyn Mair cuando se le preguntó sobre la adicción a las compras. Sólo en Estados Unidos, donde realizó la entrevista, Hay más de 15 millones de personas adictas a las compras.
La psicóloga no encontró una respuesta sencilla para dejar la adicción: «Es muy difícil, comprar se vuelve parte de lo que hacemos, parte de nuestra identidad. Y además, nos gusta la novedad, nos gusta la moda, queremos lucir bien y mejorar. Pero las personas también pueden cambiar sus hábitos a través de programas estructurados de cambio de comportamiento para que puedan aprender a identificar cuáles son los hábitos, cuáles son los detonantes que les animan a salir a comprar más, más, más y más»afirmó. Según explica, estar informado y saber cómo funcionan los procesos de captación de clientes ayuda a frenar la adicción a las compras.