El domingo pasado, nada más bajarse del coche y quitarse el casco, Carlos Sainz Celebró su tercer puesto en Las Vegas de forma muy contenida. Fue el octavo podio en una temporada en la que también ha conseguido dos victorias. Un auténtico empujón para Ferrari en su lucha por el Mundial de constructores. Sin embargo, nadie del personal superior del escudería Se acercó a recibirlo. De hecho, el primer abrazo de Carlos en el parque fue para Roberto Merhiuno de los miembros del círculo íntimo de Carlos. Un núcleo duro que se autodenomina equipo 55 y que suele celebrar cada éxito levantando un extintor a modo de trofeo.
Merhi, que disputó 13 carreras del Mundial de 2015 con Marussia, también viajó este fin de semana al GP de Qatar. Desde el inicio del campeonato, teto Ha estado supervisando la preparación de Sainz en compañía de Pierluigi della Bonasu preparador físico. De inconfundible bigote y una simpatía arrolladora, el italiano luce orgulloso sus dos tatuajes como ofrenda a las dos victorias de 2024. Y bromea con lo sucedido en una discoteca de la Ciudad de México, donde cargó a Carlos sobre sus hombros brindando por el último. uno. Dos señales del clima que se respira en el equipo 55. Apenas queda rastro de aquella camaradería en Ferrari, obligada hoy por las emergencias y desconcertada por los rifirrafes entre sus pilotos.
En estas dos últimas carreras, el equipo dirigido por Frédéric Vasseur necesita superar a McLaren por 24 puntos para ganar el Campeonato Mundial de Constructores. Más que un objetivo es una exigencia, dado que ya está sufriendo la peor travesía por el desierto de su historia. Han pasado 5.869 días desde que conquistó su último título en 2008. Nueve días más que la sequía anterior, entre 1983 y 1999. Sin embargo, los recientes acontecimientos en Las Vegas y las características del recorrido qatarí no invitan al optimismo este fin de semana. Ni para Sainz, ni para Carlos Leclerc.
«mirarnos a los ojos»
A primera hora del pasado domingo, el monegasco abandonó muy alterado el Circuito del Strip. En su opinión, Carlos no quiso respetar las órdenes del equipo, incumpliendo lo acordado en el instrucciones anterior. Entonces vio una oportunidad perdida de cerrar la brecha con Lando Norrissegundo en el Mundial, con un margen de 21 puntos. Su enfado llegó a un punto hiriente: «Si no hizo caso a lo que le dijeron, pruebe a decírselo en español». Sin embargo, escuchar íntegramente los mensajes radiofónicos contradice la versión de Leclerc. Sainz pudo adelantarle en la vuelta 33 sin afectar el ritmo de su compañero y luego se defendió de su acoso con el DRS porque el granulado sus neumáticos y su batería no le permitieron un mejor ritmo.
«Todos cometimos errores. Lo hemos discutido a puerta cerrada y hemos pasado página», explicó Sainz el jueves en Losail, tras definir su vínculo personal con Leclerc como «muy bueno». Una versión que avala su antagonista: «A veces era yo quien superaba los límites y otras veces él lo hacía. Pero siempre hablábamos de ello, mirándonos a los ojos». Esta misma temporada, el tifosi Ya empezaron a temblar durante los enfrentamientos en el GP de Estados Unidos y el carrera de velocidad del GP de China.
Entonces Vasseur tuvo que poner Las Vegas en orden. Según el reconocido periodista Leo Turrinidel periódico Diario Nacionalla solicitud de equipo principal No admitió medias tintas: «Aún quedan dos fines de semana juntos y Ferrari exige una colaboración leal. Perder cualquier esperanza en el Campeonato del Mundo por caprichos individuales sería intolerable».
Este tipo de advertencias no son necesarias con Sainz, que ni siquiera levantó la voz tras perder su escaño en favor de Lewis Hamilton. Una situación muy incómoda. Casi una traición. La gota que colmaría la paciencia de cualquiera. Sainz, comprometido con Williams hasta más allá de 2026, no se va a cerrar a un hipotético regreso a Maranello. Quemar los puentes, como lo demuestra el caso de fernando alonsoNunca será una buena idea. Ni siquiera en esto escuderíadedicado desde 2020 con un Leclerc que allí se conoce como El predestinado.
103 puntos en juego
Aún sabiendo todo lo que pasa a su alrededor, Sainz quiere seguir defendiendo lealmente el Caballo hasta el próximo 8 de diciembre. Si recupera nueve puntos en contra Óscar PiastriTerminará cuarto en el Mundial, la mejor posición de su vida. Apenas unas horas después del GP de Abu Dabi, probará por primera vez el Williams durante un test oficial.
De momento, la batalla parece difícil contra McLaren, que el pasado mes de octubre ya subió al podio a sus dos pilotos en Qatar, sólo por detrás Max Verstappen. Con 103 puntos en juego, incluidos carrera de velocidad El sábado, el equipo de Woking parte como favorito para ganar su primer título desde 1998. El MCL-38 parece adaptarse mejor a las curvas rápidas de Losail, donde el año pasado hubo que adaptar una estrategia de tres paradas por problemas de neumáticos. Para paliar estas situaciones críticas, los organizadores han pulido los pianos en siete de las 16 curvas y han colocado franjas de gravilla para evitar que quienes se salgan de la trazada obtengan ventaja.
Si Ferrari todavía tiene opciones para el último capítulo, tampoco se espera que Abu Dabi sea un territorio favorable. Durante las últimas 15 ediciones en Marina Bay, los coches rojos no lograron ni una sola victoria, rodando sólo 13 vueltas en cabeza. En cualquier caso, ese será el momento de Sainz para decir adiós Ricardo Adamiingeniero de vías, o Pedro Cebrián y Rita Simoniniresponsables de comunicación. También con los ingenieros. Calum McDonald y Ricardo Corte. Todos los miembros honorarios de la equipo 55. Aquel grupo de amigos que el pasado mes de marzo en Bahréin posaron por primera vez con un extintor porque Ferrari ya había embalado el trofeo original.