Transportes activa los primeros fondos de emergencia y comienza a reconstruir las vías más dañadas por la DANA en Valencia
El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha declarado la emergencia y destinado unos 24,8 millones de euros para iniciar la reconstrucción de las vías más dañadas por la DANA en las provincias de Valencia y Cuenca: la A-7, la N-330 y la N-322. Esta primera dotación presupuestaria permite iniciar de forma inminente las obras de estas vías de importancia estratégica para la Red de Carreteras del Estado.
En concreto, se han puesto a disposición de emergencia 12,6 millones de euros para reconstruir el viaducto derrumbado de la A-7, situado en el municipio de Quart de Poblet, y construir un desvío provisional de tres carriles junto a la propia autovía. Ya han comenzado las primeras obras de esta autovía con el objetivo de restablecer lo antes posible esta importante conexión para la movilidad metropolitana de Valencia.
Los otros 12,2 millones de euros asignados se destinan a la reconstrucción de la carretera N-322 en las proximidades de Requena, y de la N-330 en distintos tramos de las provincias de Valencia y Cuenca, gravemente dañadas por las intensas lluvias que han provocado el desbordamiento de numerosos cauces. Por su parte, la V-31, carretera en dirección Alicante, ya ha sido despejada. Se recomienda evitar desplazamientos y priorizar la labor de los servicios de emergencia y salvamento.
El tramo A-3 entre Cuenca – Valencia es transitable para emergencias y servicios de salvamento. Se están realizando trabajos de retirada de material y vehículos. Su autorización de circulación está muy condicionada.
La extraordinaria subida del caudal del Barranco del Gallego del Poyo ha provocado el colapso de la estructura de cruce de la Autovía del Mediterráneo A-7 (km 336.850), en el municipio de Quart de Poblet.
Por otro lado, las extraordinarias crecidas del río Magro, en Requena, de un cauce afluente de la rambla de la Torre, en Utiel, y de la Cañada de la Rinconada o del Asno, en Landete, han provocado la ruina del Obras de cruce de las carreteras N-322 y N-330, provocando el cierre total de dichas vías.
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