La civilización maya ha dejado muchas grandes ciudades que han llegado hasta nuestros días, como Chitchén Itzá, Tulum o Uxmal. Pero estos son sólo una parte de los que existieron, muchos de los cuales quedaron en ruinas y cayeron en el olvido. Ahora, una de estas ciudades perdidas ha sido redescubierta en el estado de Campeche, en la Península de Yucatán (México).
El descubrimiento ha sido posible gracias al examen de un estudio previo realizado con LiDAR, una tecnología cartográfica que permite identificar ruinas que pasan desapercibidas a simple vista por haber quedado enterradas u ocultas entre la vegetación. Entonces, Se han localizado 6.674 estructuras que corresponden, según un estudio publicado recientemente, a los restos de una ciudad maya desaparecida.
Un descubrimiento afortunado
La tecnología LiDAR ha hecho posible recientemente muchos descubrimientos que de otro modo habrían sido casi imposibles de realizar. Este sistema de mapeo emite pulsos de luz láser que rebotan en las superficies a su paso: el dispositivo mide la distancia que han recorrido los rayos de luz y así reconstruye una imagen tridimensional muy precisa del terreno.
Pero la característica fundamental de esta tecnología, que la hace tan útil en el campo de la arqueología, es que el láser penetra la cubierta vegetal y revela lo que hay debajo. Esto permite Identificar estructuras construidas por humanos. los cuales, debido al paso del tiempo, han quedado completamente ocultos. Es el caso de la ciudad maya descubierta, sobre cuyas ruinas se extienden ahora campos de cultivo.
El descubrimiento fue muy afortunado ya que, en este caso, el mapeo ya existía. En 2013 se escanearon unos 130 kilómetros cuadrados de terreno. en los estados de Campeche y Yucatáncomo parte de un estudio para medir el carbono en los bosques. Un grupo de investigadores de la Universidad del Norte de Arizona pudo acceder a estos mapas para examinarlos y descubrir lo que parecían ser estructuras de origen humano.
una ciudad desconocida
Al examinar las imágenes obtenidas con el LiDAR, los investigadores identificaron cuatro porciones de terreno (llamadas bloques) donde había estructuras construidas por la mano del hombre:
- Bloque 1, en el que parece haberse ubicado un asentamiento agrícola relativamente poblado.
- El bloque 2, que contiene la zona más densamente urbanizada, que los investigadores describen como una ciudad.
- El Bloque 3, que por su baja densidad constructiva y ausencia de estructuras monumentales, es considerado por el equipo como una zona de vivienda rural.
- El bloque 4, ubicado en el estado de Yucatán, está separado del resto y no ha sido analizado en el estudio.
El Bloque 2 es el que ha despertado mayor interés entre los investigadores, ya que por su densidad constructiva y presencia de estructuras monumentales, tiene todas las características de una ciudad maya clásicaque el equipo ha llamado Valeriana en honor a una laguna cercana. Los asentamientos y la infraestructura agrícola ocupan completamente el área de estudio de 16,6 kilómetros cuadrados, que tiene una alta densidad de construcción.
Lo más destacable de esta ciudad es dos importantes centros de arquitectura monumentalubicados a 2 kilómetros de distancia entre sí y conectados por un denso y continuo asentamiento residencial. El estilo y la densidad de la arquitectura se asemejan mucho a los que se ven en el área arqueológica maya Chactun-Tamchen, a unos 20 km al suroeste. Por eso los autores del estudio consideran que estamos ante las ruinas de una antigua ciudad maya, y bastante importante.
El mayor de los dos recintos monumentales se sitúa al norte de la manzana y cuenta con todas las características de una capital política maya del periodo Clásico (c. 250-900 d.C.): múltiples plazas cerradas conectadas por una amplia calzada; pirámides; un juego de pelota y un embalse donde se acumulaba agua de un arroyo. Además, presenta un estilo de patios residenciales curvos en forma de anfiteatro que están presentes en otros sitios arqueológicos yucatecos, los cuales conforman un estilo regional muy característico.
La investigación futura se centrará en el trabajo de campo de los asentamientos descubiertos, para descubre su evolución y etapas de construcciónya que el mapeo revela una imagen estática de las ruinas de la ciudad, pero no la cronología de su desarrollo. Esto podría ayudar a comprender muchas cosas, entre otras, el declive de la influencia maya a partir del siglo VIII, que parece haber estado relacionado –al menos en parte– con el modelo de agricultura intensiva y explotación de recursos de las grandes ciudades.