En plena carrera por alcanzar hasta el 10% de Telefónica, la SEPI se ha armado con 2.000 millones de euros del Ministerio de Hacienda. Así se desprende de las estadísticas de ejecución presupuestaria del mes de febrero, que muestran que el holding estatal tiene pólvora suficiente para comprar todos los títulos deseados de la teleco española.
El documento, cuyo contenido ha adelantado El Objetivo, da prueba de los planes de la organización que preside Belén Gualda poco después de anunciar que finalmente se había hecho con el 3% de Telefónica. según ya consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La intención, sin embargo, es llegar a un máximo del 10%. «La entrada de Sepi, accionista con vocación de permanencia«Permitirá a Telefónica dotar de mayor estabilidad accionarial para alcanzar sus objetivos», afirmó el organismo dependiente del Tesoro. Otro objetivo era salvaguardar «las capacidades estratégicas de una empresa estratégica para los intereses nacionales por su liderazgo en el sector de las telecomunicaciones». y sus capacidades industriales, determinantes en ámbitos como la seguridad y la defensa».
De esta forma, el organismo público puso fin a meses de espera, ya que sus intenciones habían sido comunicadas en octubre del año pasado y confirmado firmemente el 19 de diciembre tras un acuerdo adoptado por el Consejo de Ministros.
Participación en derivados
De momento, se apunta a que Sepi habría aparcado otro 2% más en derivados financieros, según Europa Press. Una vez que las haga efectivas, su peso en la teleco aumentará hasta el 5%, lo que le llevará a igualar fuerzas con otros accionistas significativos. Uno de ellos es CaixaBank, que precisamente notificó el mismo día que Sepi entró en reducción de un punto su participación en Telefónica.. La entidad financiera se quedó con el 2,51% del capital de la compañía española tras liquidar parcialmente una cobertura del 1,957%.
No hay que olvidar que en la hoja de ruta estatal influye también la del Gobierno de Arabia Saudí, que, a través de su operador Saudi Telecom Company (Grupo STC), anunció el pasado verano su entrada en el capital del operador español con la adquisición de un porcentaje similar a Sepi. El Ejecutivo saudí participa desde el fondo soberano PIF y también ha condicionado parte de su despliegue a la ejecución de derivados financieros hasta alcanzar el 10%.