A diferencia de otros cuarteles, bases aéreas o navales repartidas por toda España, la pequeña instalación militar de Villatobas, un tranquilo municipio toledano a sólo una hora de Madrid, no llama especialmente la atención. Si acaso, para cualquiera que conduzca por la N-301 o AP-36 destaca una gran esfera pintada de camuflaje que rompe la monotonía de los extensos campos de cultivo que la rodean.
Sin embargo, estas pequeñas instalaciones son fundamentales para la seguridad de nuestro país y de la OTAN y hace tiempo lo fueron incluso durante la Guerra Fría, que amenazaba al mundo con una catástrofe nuclear.
Aunque a lo largo de sus varias décadas de vida ha tenido varios nombres, su nombre actual es Escuadrón de Vigilancia Aérea nº 2 (EVA 2) y casas un moderno radar Lanza 3D LRR (radar de largo alcance) que juega un papel crucial no sólo en la protección del espacio aéreo nacional, sino también en la seguridad colectiva de la OTAN.
Desde sus orígenes en colaboración con el Ejército de Estados Unidos hasta su plena integración en las estructuras de defensa españolas y la Alianza Atlántica, la historia del EVA 2 es testimonio de adaptación tecnológica y compromiso estratégico.
Como curiosidad cabe destacar que se trata del único radar del Sistema de Control y Vigilancia Aérea que no está situado en la cima de una montaña.
Los inicios: una colaboración transatlántica
El Escuadrón de Vigilancia Aérea No. 2 tiene su Tiene sus raíces en los acuerdos bilaterales firmados entre España y Estados Unidos a mediados del siglo XX.. En un contexto marcado por la Guerra Fría, ambos países reconocieron la necesidad de establecer una red de vigilancia aérea capaz de detectar posibles incursiones hostiles en el flanco sur de Europa. En este marco, Estados Unidos proporcionó los primeros sistemas de radar y apoyo logístico para la creación del EVA 2, que comenzó a operar en la década de 1950 como parte de una red de defensa aérea más amplia.
El 21 de abril de 1956 se creó el Mando de Defensa Aérea, englobando al EVA 2 como miembro de la Red de Alerta y Control.
La construcción del escuadrón estuvo a cargo de la Fuerza Aérea de Estados Unidos. En 1955 finalizó la construcción del radar y la Escuadrilla contó con su primer jefe español: el teniente coronel Rafael del Pozo y de la Piedra, con su inauguración oficial en 1958.
El EVA 2 es la primera Escuadrilla de la Red en poner en funcionamiento sus equipos y comenzar a vigilar el espacio aéreo de España desde el 8 de julio de 1958. Ese mismo día llevó a cabo la primera interceptación aérea, junto con el Ala de Caza nº 1, equipado con aviones F-86-F Sabre, de la Base Aérea de Manises.
Se comparte trabajo operativo con soldados del 871 SQN «GUARDIAN ANGEL» de la USAF hasta el 20 de noviembre de 1964, cuando se reciben las instalaciones y equipos; A partir de esta fecha, el ejército español asume la responsabilidad de la vigilancia del Espacio Aéreo español.
La modernización del sistema de defensa aérea supuso el cambio de nombre: del Escuadrón de Alerta y Control al Escuadrón de Vigilancia Aérea número 2 en 1976.
A día de hoy, EVA 2 continúa con la misión encomendada de vigilar el Espacio Aéreo Español las 24 horas del día, todos los días del año.
En sus primeros años, el escuadrón dependía casi exclusivamente de personal y tecnología estadounidenses.. Sin embargo, con el paso del tiempo y el fortalecimiento de las capacidades militares españolas, el control y operación del EVA 2 pasó progresivamente a manos del Ejército del Aire español. Esta transición se consolidó en los años 80, cuando España se incorporó plenamente a la estructura militar de la OTAN.
El radar Lanza 3D: tecnología española de vanguardia
Hoy, el EVA 2 está equipado con el radar Lanza 3D, desarrollado por la empresa española Indra, uno de los líderes europeos en tecnología de defensa. Este radar de próxima generación reemplaza a los sistemas más antiguos y ofrece capacidades muy superiores, como la detección tridimensional de aeronaves a diferentes altitudes, una cobertura ampliada y una mayor resistencia a las contramedidas electrónicas.
El Lanza 3D está diseñado para operar de manera integrada con el Sistema de Comando y Control de la Fuerza Aérea (SIMCA) y el Sistema Integrado de Defensa Aérea y Antimisiles de la OTAN (NATINAMDS). Esto significa que cualquier amenaza detectada en el espacio aéreo español podrá comunicarse en tiempo real a los centros de mando aliados, permitiendo una respuesta coordinada y eficaz.
El área de responsabilidad del EVA 2 abarca la zona central de la Península Ibéricauna región que incluye objetivos estratégicos como Madrid y otras infraestructuras críticas. Gracias a su ubicación geográfica y tecnología de radar, el escuadrón desempeña un papel clave en la detección temprana de aviones, misiles y otras amenazas aéreas no identificadas.
Orgánicamente depende del Mando Aéreo de Combate (MACOM) a través del Cuartel General del Sistema de Mando y Control (JSMC).
Funciones principales de EVA 2
La principal tarea del Escuadrón de Vigilancia Aérea No. 2 es asegurar la vigilancia continua del espacio aéreo en su zona de responsabilidad. Para conseguirlo, su plantilla está formada por un equipo multidisciplinar que incluye operadores de radar, técnicos de mantenimiento y analistas de inteligencia. Sus tareas específicas incluyen:
- Detección de amenazas: Identificar aeronaves no identificadas, incursiones ilegales y posibles ataques aéreos.
- Transmisión de datos: Comunique información en tiempo real a los centros de mando de la Fuerza Aérea y la OTAN.
- Apoyo a operaciones militares: Facilitar la coordinación de misiones de interceptación y defensa aérea.
- Colaboración internacional: Integrarse en ejercicios y operaciones multinacionales como parte de la Alianza Atlántica.
Integración en la OTAN: una pieza clave de NATINAMDS
Desde que se unió a la OTAN, EVA 2 ha sido un componente esencial del Sistema Integrado de Defensa Aérea y Antimisiles (NATINAMDS). Este sistema interconecta las fuerzas de defensa aérea de los países miembros de la Alianza, permitiendo una supervisión conjunta y una respuesta inmediata ante cualquier amenaza.
La contribución de EVA 2 a NATINAMDS no se limita a la detección de amenazas. También participa en ejercicios internacionales que buscan mejorar la interoperabilidad entre fuerzas aliadas. Estas maniobras incluyen simulaciones de ataques aéreos y misiles balísticos, en las que el EVA 2 juega un papel crucial como nodo de vigilancia y coordinación.
La vida en el Cuartel Aéreo de Villatobas
El personal destinado en EVA 2 trabaja en un entorno altamente técnico y exigente, pero también se beneficia de un fuerte sentido de camaradería y compromiso. El Cuartel Aéreo de Villatobas cuenta con modernas instalaciones que incluyen áreas de entrenamiento, salas de descanso y alojamiento del personal.
La escuadrilla también mantiene una estrecha relación con la comunidad local de Villatobas, participando en eventos comunitarios y fomentando el entendimiento entre la población civil y militar. Esta colaboración ha ayudado a estrechar los vínculos entre el cuartel y el pueblo, convirtiéndolo en un ejemplo de integración.
Desafíos futuros
A pesar de su avanzada tecnología, el EVA 2 enfrenta importantes desafíos. El constante desarrollo de amenazas aéreas, como drones autónomos y misiles hipersónicos, requiere una actualización continua de sus sistemas y procesos. Además, la creciente sofisticación de las contramedidas electrónicas plantea desafíos adicionales a la eficacia del radar Lanza 3D.
Como respuesta a estos retos, el Ministerio de Defensa español ha anunciado planes para reforzar las capacidades tecnológicas y operativas de EVA 2. Estas iniciativas incluyen la mejora de los sistemas de ciberseguridad, la adquisición de nuevas plataformas de detección y la ampliación de la formación del personal.
Conclusión
El Escuadrón de Vigilancia Aérea nº 2 y el Cuartel Aéreo de Villatobas son mucho más que un punto en el mapa del Canal de la Mancha. Desde su creación en colaboración con Estados Unidos hasta su papel actual como pilar de la defensa aérea de la OTAN, EVA 2 encarna la evolución de las capacidades militares españolas y su compromiso con la seguridad nacional e internacional. En un mundo donde las amenazas aéreas son cada vez más complejas, instalaciones como ésta son garantes de paz y estabilidad.