Damasco, (EFE).- Los insurgentes encargaron a Mohamed al Bashir, presidente del Gobierno de Salvación -la administración de facto en la provincia de Idlib, en el norte de Siria, controlada por la Organización para la Liberación del Levante- formar un gobierno para la transición en Siria tras la derrocamiento de Bashar al Assad, informó la televisión siria ahora dirigida por la oposición.
«El presidente del Gobierno de Salvación, Mohamed al Bashir, tendrá la tarea de formar un nuevo gobierno sirio para gestionar la fase de transición», indicó la televisión.
El Gobierno de Salvación es una especie de rama política y civil de la Organización para la Liberación del Levante (Hayat Tahrir al Sham o HTS, en árabe) que se creó en Idlib, provincia del noroeste de Siria y bastión de la oposición.
Reunión tripartita para el traspaso de poder
Poco después del anuncio, la televisión siria afirmó que hoy se celebrará una reunión tripartita en Damasco para determinar la transferencia del poder en Siria y evitar que el país entre en un estado de «caos» tras la salida de Al Assad.
Los tres partidos reunidos son el líder de la coalición rebelde encabezada por la Organización para la Liberación del Levante, Ahmed Al Sharea (nombre de guerra Abu Mohamed al Jolani), que lideró la ofensiva para “liberar” Damasco; el primer ministro sirio, Mohamed Ghazi al Jalali y el presidente del Gobierno de Salvación, Mohamed al Bashir.
Según la televisión siria, antiguamente de la oposición pero ahora canal oficial, “la reunión se celebra para determinar la transición de los esfuerzos de poder y evitar que Siria entre en un estado de caos”.
Gobierno de transición “civil”
Sin embargo, ayer domingo el presidente del máximo órgano político de la oposición siria en el exilio, la Coalición Nacional Siria (CNFROS), Hadi Al Bahra, dijo a Efe que existe un acuerdo tras la caída de Al Assad, para que el Gobierno de transición Será “civil”, no será de la Organización Islámica para la Liberación del Levante ni del Gobierno de Salvación.
Al Bahra explicó que entre la coalición opositora hay un conjunto de reglas «para garantizar que no haya extremismo sobre el terreno, ni malas conductas, ni violaciones de los derechos humanos», algo que aseguró está «funcionando muy bien hasta el momento» pese a que Aún no se ha reunido con el líder de HTS.
El HTS, tras tomar el poder en Siria, ha emitido varios comunicados prometiendo tolerancia hacia los seguidores de diferentes sectas y confesiones en el país, y advirtiendo a sus miembros que eviten malos tratos o ataques a civiles.