Macías denuncia “irregular” composición del Tribunal Constitucional que aprobó exclusión de Campo de la amnistía
El juez conservador José María Macías ha denunciado que el pleno del Tribunal Constitucional que ha aceptado por la mínima abstención de Juan Carlos Campo la Ley de Amnistía se ha constituido de forma “irregular” y ha advertido de que da la sensación de que El objetivo es “preservar una cierta mayoría”.
Macías ha emitido un voto disidente, en el que Critica duramente la forma en que se desarrolló la sesión plenaria del martesque ha aceptado la petición de Campo de retirarse de todos los asuntos de amnistía por 6 votos a favor y 5 en contra, cuando hace dos semanas se avaló por unanimidad su abstención en la cuestión de inconstitucionalidad del Tribunal Supremo.
“La forma en que se ha resuelto asumiendo y participando en el incidente de abstención de un magistrado, otros magistrados se recusaron antes de que se resuelva la recusación, es severamente irregular“y lo será más aún si esta situación se reproduce en los incidentes que quedan pendientes”, afirmó el juez, en su primer voto disidente desde que fue nombrado juez hace unas semanas.
Según Macías, ninguno de los tres magistrados que tienen pendiente la tramitación y resolución de las recusaciones presentadas contra ellos -el presidente Cándido Conde Pumpido, la magistrada Laura Diez y él mismo- deberían haber participado en el debate de esta mañana.
De hecho, señala que “de acuerdo con las objeciones” que planteó en su voto, no debió participar, según manifestó. “Debo señalar que Mi participación en la Sesión Plenaria se ha producido en contra de mi criterio. y por decisión del propio Pleno.”
Más allá de su situación particular, el magistrado advierte que “el Pleno de la Corte se ha constituido de manera irregular ya que ha participado jueces recusados antes de que se resolvieran las recusaciones” dejando claro que “la formación de un tribunal no es un mero asunto interno, organizativo o procesal” sino que “es una cuestión medular”.
Por eso entiende que “lo que inevitablemente debemos concluir es que no queremos proteger el funcionamiento del tribunal, sino preservar una cierta mayoría que antes se daba por sentada, y ese enfoque desacreditaría al TC como órgano de justicia y contribuiría al discurso de su politización”.
También cuestiona que las abstenciones de Campo hayan sido asumidas por el presidente, pues los informes han sido atribuidos “a un magistrado afectado por una recusación no resuelta”.
Una decisión, a su juicio, que no encuentra respaldo jurídico en la propia ley que regula el tribunal, que atribuye al presidente la facultad de adoptar “las medidas precisas para el funcionamiento del Tribunal, de las Salas y de las Secciones”, porque, según Macías, afecta a “aspectos puramente organizativos que en modo alguno permiten desconocer o exceptuar las reglas de distribución de asuntos”.
Aunque este plenario aún no ha abordado explícitamente las recusaciones, La polémica ya está servida Son 54 ellos -algo nunca visto en la corte- cuyo futuro parece vital para alterar o mantener el actual equilibrio de poder entre progresistas y conservadores, que con la salida de Campo es ahora de 6 a 5.
La votación del martes fue un anticipo de ello. Una de las diferencias de opinión de los conservadores fue que no les gustaba que el presidente fuera el ponente de las abstenciones de Campo.
Pero además, según fuentes jurídicas, No quisieron que los tres magistrados recusados -Conde Pumpido, Diez y Macías- formaran parte del pleno que iba a votar abstenerse porque lo impugnaban.
Así, el debate se centra ahora en cómo tramitar y resolver las recusaciones, con Visiones contrastantes entre los bloques progresista y conservadorlo que podría bloquear el tribunal.
Como ocurrió este martes, Los conservadores abogan por excluir del debate a todos los cuestionadoslo que dejaría al tribunal en un empate (4 a 4) para resolver todos los incidentes de recusación; aunque otras voces entienden que sólo el recusado en cuestión debería retirarse de su propio voto y participar del de sus colegas.