Francis Lorenzo y Pocholo Conectaron desde el primer día que pusieron un pie en MasterChef Celebrity 9. Según el actor, ambos tienen en común que son “disfrutones” y que les gusta la vida. En el tercer programa les tocó cocinar juntos y no podían estar más contentos. Ahora solo faltaba ver si esa buena vibra también seguiría trabajando de la mano. Y así fue. Pero mantener la alegría no parecía suficiente para preparar un buen platillo y aunque sabía muy bien, la estética de su receta «El amor se escribe con la lengua» No dejó indiferentes a los jueces.
Samantha, Pepe y Jordi no podían creer lo que veían sus ojos cuando vieron el resultado final de Pocholo y Francis. “¿En qué os habéis inspirado para preparar el plato?”, preguntó Pepe. Pocholo tomó la palabra: «En mí. Dos texturas, dos platos diferentes. ¡Increíble!». Francis quiso destacar entonces el trabajo de su compañero: «Tengo que decir que ha arreglado una salsa que habíamos perdido. Nos dimos cuenta de que no sólo era útil, sino que además daba mucho valor al plato». En ese momento y antes de degustar la preparación, los tres jueces destacaron la mala estética del plato. «Es un plato que se parece al Espacio (una discoteca muy famosa en Ibiza)», reconoció Samantha. Jordi fue más allá: «Parece una bandeja de camarero cuando te trae una botella de champán entre bengalas».
Mala estética, mal gusto
Las risas inundaron las cocinas de MasterChef Celebrity 9. Y Pocholo y Francis se tomaron bien las comparaciones. Sin embargo, una vez que probaron el plato, los jueces destacaron que, más allá del emplatado, era un gran plato. —La lengua está bien hecha, bien hecha. Pocholo, es verdad que has preparado una salsa que no se podía comer. Y la alcachofa está buena.Pepe lo ha dicho. Jordi ha querido ejemplificar la teoría y montar el mismo plato pero con una estética superior: «Es fácil hacerlo más bonito. Pero los elementos están bien».
Pocholo entendió el mensaje y reconoció que los jueces tenían “toda la razón”. Tanto él como Francis admitieron que la estética podría mejorarse mucho, pero terminaron contentos porque disfrutaron cocinando juntos y el sabor de su plato fue muy apreciado.