Viernes, 28 de junio de 2024, 14:47
El Museo Egipcio de Melilla (MEM) busca un hogar en Málaga. El espacio de la Fundación Gaselec, con una de las colecciones más amplias de España sobre el Antiguo Egipto, cierra sus puertas definitivamente y anuncia su intención de trasladarse a la Costa del Sol.
«Aunque no hay una fecha exacta de apertura, estamos trabajando para que este traslado se realice de la mejor manera posible para que podamos continuar con la misión de difundir y preservar la riqueza del patrimonio egipcio», explicó su director, Gustavo Cabanillas. , en una carta publicada en su sitio web.
El MEM justifica esta medida en «las dificultades para encontrar recursos económicos y laborales», y confía en que el cambio de ubicación impulse el número de visitantes, en una ciudad donde el turismo llena a diario los museos. Pasará a llamarse MEMA (Museo Egipcio de Málaga) y exhibirá algunas de las 1.500 piezas de esta colección privada, fruto de 25 años de coleccionismo. En Melilla se exponen desde 2021 alrededor de 300 objetos arqueológicos repartidos en tres plantas.
De momento, con el cierre al público en Melilla todavía muy reciente, el traslado a Málaga está en una fase muy temprana. Ya se han establecido contactos con varias instituciones malagueñas, pero el mayor reto sigue siendo encontrar un centro con el tamaño suficiente para albergar estas obras.
Según su página web, el MEM es el segundo espacio dedicado exclusivamente al arte de los faraones en España, junto con el Museo Egipcio de la Fundación Arqueológica Clos de Barcelona. Sólo este y el Museo Arqueológico Nacional de Madrid lo superan en número de artefactos.
La Fundación Gaselec, propietaria de la colección, es una institución cultural privada sin ánimo de lucro creada en 2004 en Melilla «como respuesta a la necesidad de incrementar el número de espacios culturales, potenciar el desarrollo de la cultura, promover la investigación científica, la protección de la fauna, la flora y el medio ambiente».