Pagani ha presentado el nuevo Utopia Roadster. Un superdeportivo a la altura de la marca italiana de hiperlujo en todos los sentidos. Excesivo en su estética, en su propuesta mecánica y, por supuesto, en su precio. Pero, sin embargo, muy poco excesivo en cuanto a peso. Una de las grandes razones, según Horacio Pagani, por la que no fabrican coches eléctricos.
Aunque la mayoría de los detalles ya se conocían, Horacio Pagani los presentó en sociedad su ultima joya. Un superdeportivo que se dirige a los más puristas con una de esas fórmulas que nunca fallan: motor demencial y peso reducido.
Una de esas fórmulas que no parecen poder entregar coches eléctricos de momento y que es, según el jefe de la compañía, uno de los principales motivos por los que no fabrican coches eléctricos.
El problema del peso
Más allá de la potencia, si algo hace feliz al amante de los deportivos clásicos es la ligereza. Es algo de lo que alardea Pagani, de lo que ha alardeado Lotus y de lo que, por supuesto, no puede presumir un coche eléctrico.
El nuevo Pagani Utopia Roadster es una oda al purismo. Motor V12 biturbo de 6.0 litros desarrollado por Mercedes-AMG que entrega hasta 863 CV de potencia. Con un par de 1.100 Nm entre 2.800 y 5.900 rpm, convierten al Pagani en un auténtico misil en un rango de revoluciones muy amplio. Si le sumamos que su peso apenas se queda en los 1.280 kg, tenemos un deportivo sin ningún tipo de electrificación y con posibilidad de montar una caja de cambios manual robotizada de siete velocidades para alcanzar una velocidad máxima de 349 km/h.
«Hemos notado que nuestro cliente, el cliente Pagani, el mismo que te pide una transmisión manual, no quiere saber nada de un auto eléctrico», dijo Horacio Pagani en entrevista con Engranaje superiordonde el máximo responsable de la compañía ha expresado su opinión sobre un futuro eléctrico para Pagani.
Según el directivo, «es ridículo» que las empresas opten por convencer a los clientes de pasarse al coche eléctrico por pura energía. «¿Por qué un coche normal tiene 900 caballos y un coche eléctrico tiene que tener 2.000 caballos? Lo considero ridículo. Esos coches con tanta potencia y tan pesados pueden ser muy inseguros», afirmó en la entrevista.
Pagani también pone el ejemplo del Rimac Nevera, un coche eléctrico de cifras meteóricas, pero también habla de Lotus. Horacio Pagani dice de ambas empresas que son «lindos autos, y tengo conocidos que los han conducido y Dicen que les va muy bien«Pero está claro que la potencia y la obligación de tener tanto peso los convierte en coches poco recomendables.
Las palabras resultan especialmente interesantes si tenemos en cuenta que Pagani ha huido de la electrificación de sus modelos. Estos superdeportivos italianos no añaden ni un solo CV de potencia a través de la electricidad y apuestan por mantener el peso lo más contenido posible, una de las grandes críticas que se le ha hecho a Lotus.
La compañía británica, creada por Colin Chapman, siempre tuvo en mente ser primero luz y luego poderosa. Algo que ha pasado a un segundo plano con lanzamientos que rondan los 2.000 kg.
«Lo vemos, cuando vamos a 50 CV más, revisamos todos los sistemas de tracción y electrónicos con Bosch. Aumentar el peso nos lleva, en este caso con Pirelli, a revisar los neumáticos», concluye Pagani, quien explica cómo se produce el sobrepeso. en este tipo de coche.
Una tendencia que se repite
El caso de Pagani es particular. La compañía italiana puede darse el lujo de olvidarse de electrificar sus superdeportivos por la sencilla razón de que apenas fabrican unidades a final de año. Hay que tener en cuenta que se espera que la nueva normativa de emisiones Euro 7 sólo se aplique a los fabricantes que produzcan más de 10.000 unidades al año.
Si pensabas que la creación de un Lamborghini Revuelto era cara, no tiene nada que ver con un Pagani. Los coches de Horacio son auténticas joyas de las que sólo se fabrican 40 cada año. Fabricar una unidad puede llevar más de medio año. Por tanto, su impacto sobre la suma total de emisiones es insignificante en el balance global.
Esto lleva al extremo la tendencia que parecen estar viviendo los fabricantes con el coche eléctrico. Cuanto más caro es dentro de una gama de vehículos de alta gama o de lujo, menos se compra. Mercedes lo ha vivido pero Rimac también lo está viviendo en carne propia. Y tanto Horacio Pagani como Mate Rimac, director de la empresa, señalan el mismo problema:
Creo que los políticos se apresuraron. Deberían haberle dado tiempo al coche eléctrico para que entrara poco a poco en el mercado. En cambio, los planes con incentivos y leyes para 2035 han creado confusión. Y ahora, la industria tradicional está pagando por ello. Porque el cliente no está preparado y la infraestructura tampoco. Creo que tenemos que frenar todo un poco. Fomentar que en la ciudad es mejor moverse con un coche eléctrico pequeño, que no tenga muchos caballos, que se pueda enchufar en cualquier lugar. Y no exigir demasiado a la sociedad
El coche eléctrico, pese a todo, es un buen aliciente para la empresa. Pagani ya ha vendido los 130 coches que producirá del Pagani Utopia Roadster, que se venderán a un precio inicial de tres millones de euros.
Este tipo de autos son un inversióncon unas características técnicas que empiezan a convertirlas en una especie en peligro de extinción. A lo anterior hay que sumarle que los motores de combustión se están posicionando como un valor diferencial en los superdeportivos de los próximos años.
Es algo en lo que Lamborghini coincidió en una charla informal durante nuestra prueba del Lamborghini Revuelto. Si el coche eléctrico es la tecnología más común en el mercado, el cliente rico Estarás aún más dispuesto a gastar más dinero para tener algo que sólo se puede conseguir a un precio prohibitivo. Ya sea porque se fabrican un número de unidades tan reducido que la normativa no les afecta o porque se posicionan como tope de gama porque son un valor de compra diferencial en sí mismos.
Y la sensación de que los políticos han hecho todo lo posible para aceptar la transición a los coches eléctricos en el menor tiempo posible no está ayudando a vender coches de lujo propulsados por esta tecnología.
Fotos | Pagani
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