Oficinas de los inspectores de trabajo, vacias. /
Los sindicatos convocantes califican el paro de «éxito completo» y advierten al Gobierno que el conflicto se mantendrá hasta que no se cumpla con el acuerdo suscrito y mejoren sus condiciones
Los inspectores de Trabajo protagonizaron este miércoles la primera huelga de la historia y la calificaron como «un éxito completo», según señalaron los sindicatos convocantes. CCOO cifró en un 80% el seguimiento del paro de 24 horas e indicó que las dependencias de los centros de trabajo estaban «prácticamente vacíos».
«El resultado pone de manifiesto el hartazgo de la plantilla y la obligada necesidad de que los cambios lleguen a este organismo», denunciaron las organizaciones, que advirtieron que «este conflicto se va a mantener en tanto no lleguen las soluciones necesarias y se cumpla el acuerdo suscrito».
Los sindicatos acusan al Gobierno de no cumplir «nada de lo acordado» en el pacto firmado con ellos en la mesa de negociación hace año y medio (el 7 de julio de 2021), en el que se configuró un nuevo modelo de inspección y se recogían «las medidas capaces de paliar los numerosos problemas que empeoran a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y cuya intensidad crece día a día», según precisa el escrito.
En concreto, denuncian «graves carencias de plantilla, falta de carrera profesional y de horizonte laboral que contribuyen a la descapitalización de la plantilla, falta de reconocimiento y de dignificación de las funciones desarrolladas en cada uno de los puestos de la inspección con una relación de puestos de trabajo obsoleta e injusta, todo ello unido a mayores cargas de trabajo y mayor complejidad del mismo, déficit en recursos técnicos y materiales».
«Las deficiencias de la inspección son cada día más severas y más palpables, en paralelo la interlocución es ahora inexistente», advierten los sindicatos, que consideran una «irresponsabilidad abandonada de semejante manera al organismo ya su plantilla» y exigen «soluciones urgentes».
wj en