Zlatan Ibrahimovic jugó su último partido como ‘rossonero’ el 22 de mayo, ante el Sassuolo. Fue el partido que cerró la temporada pasada y coronó al Milán campeón del ‘Scudetto’ 19 años después de su última conquista. Tres días después de ese partido, Ibra fue intervenido quirúrgicamente para operarse la rodilla izquierda, intervención que le ha mantenido fuera de los terrenos de juego durante ocho meses.
Regresa en un momento clave para el Milán
Aunque eso ya es pasado porque Ibra está de vuelta. El italiano Stefano Pioli, técnico del conjunto milanés, confirmó en rueda de prensa que el internacional sueco estará en el banquillo en el importante partido liguero ante el Torino, en un momento en el que el Milan necesitaba una victoria para mantenerse en las plazas de la Champions.
De esta forma, Pioli recupera a una figura cuya importancia trasciende su rol sobre el verde, un jugador que se convirtió en líder del vestuario y que, sin embargo, no está inscrito en la lista de la Champions al no estar al cien por cien tras el largo periodo de inactividad.
«Su papel siempre ha sido el de un gran motivador y gran jugadorEspero que pueda seguir siendo. Para la Champions League, la garantía que nos podía dar era demasiado limitada en este momento, en un mes y medio, ¿quién sabe?«, ha dicho el técnico este jueves en rueda de prensa.
Ibra, clave para mirar a la Champions
El Milan es sexto en la tabla, pero sumido en una crisis de juego que le ha acompañado durante siete partidos en los que no ha conocido la victoria. Eliminado de la Copa y con la Champions a la vuelta de la esquina, los ‘rossoneri’ ocupan el puesto de la Conference League, a un punto de los puestos de la ‘Champions’, el nuevo objetivo de este Milán que arrancaba la temporada con ganas de revalidar su título.
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