Después de una noche inolvidable en la que Shakira brilló en los Latin Grammy ganando tres premios, la cantante colombiana afronta uno de los momentos más importantes de su vida. Shakira ya está de regreso en Barcelona para afrontar una inminente cita judicial.
El próximo lunes 20 de noviembre comenzará en la Audiencia de Barcelona el juicio que podría marcar un punto de inflexión para ella y su familia. Shakira está acusada de defraudar a la Hacienda española 14,5 millones de euros, con una posible pena de ocho años y dos meses de prisión. Un momento pues decisivo para la cantante, que ha aterrizado en Barcelona acompañada de su hermano Tonino y sus hijos Milan y Sasha.
Se espera que participen alrededor de 200 testigos.
Las circunstancias que rodearon su llegada a la capital catalana reflejan la gravedad de la situación. Rodeada de su familia, Shakira ingresó a su casa en una camioneta con vidrios polarizados, evitando las preguntas de los periodistas. Por si fuera poco, apareció Gerard Piqué, padre de sus hijos, para recoger a los niños.
Una docena de sesiones para determinar si es culpable
El juicio contra Shakira se extenderá por 12 días en sesiones no consecutivas cuyas fechas podrían variar dependiendo de cómo avance el juicio. La cantante deberá declarar este lunes y, luego, la defensa determinará si es necesario que Shakira siga acudiendo a los tribunales.
Se espera que a lo largo de todas estas sesiones participen alrededor de 200 testigos, entre ellos su expareja Antonio de la Rúa, empleados de servicios, vecinos y profesionales vinculados a su carrera musical. El objetivo es determinar si Shakira residió en España entre 2012 y 2014 y, por tanto, debe pagar impuestos en el país.
La defensa de la cantante colombiana, encabezada por el abogado Pau Molins, sostiene que es inocente, ya que no tuvo residencia fija en España hasta 2014 y que ha cumplido con sus obligaciones fiscales desde entonces.
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