Porto Alegre (Brasil) (EFE).- Las devastadoras inundaciones en la región sur de Brasil han dejado hasta el momento 108 muertos y 136 desaparecidos, además de 374 heridos, según el balance difundido este jueves por la Defensa Civil.
Hay casi 1,5 millones de víctimas en Rio Grande do Sul, fronterizo con Uruguay y Argentina, donde las lluvias torrenciales han causado una destrucción sin precedentes en este próspero estado brasileño, donde se han reportado 107 de las víctimas mortales.
La otra muerte se registró en el vecino estado de Santa Catarina, que también se vio afectado por la intensa tormenta de la última semana, aunque en menor medida.
Poblaciones de Brasil sumergidas por inundaciones
En Rio Grande do Sul, 425 municipios se han visto afectados, algunos de los cuales están completamente sumergidos bajo el agua y donde 6.200 han quedado completamente destruidos, según datos parciales de la Confederación Nacional de Municipios.
Según la Defensa Civil, alrededor de 232.000 personas han sido evacuadas de sus hogares y trasladadas a refugios o a casas de sus familiares.
Cientos de policías, bomberos, soldados y voluntarios siguen hoy trabajando arduamente para rescatar a la población que aún se encuentra aislada por el alto nivel del agua y que comienza a sufrir la falta de alimentos.
Además, las lluvias de las últimas horas obligaron a suspender las labores de rescate en Porto Alegre, la capital regional, donde todavía hay barrios completamente inundados y el principal aeropuerto estará cerrado al menos hasta finales de este mes.
La fuerte tormenta se desató el lunes de la semana pasada y continuó los días siguientes, provocando cuantiosos daños en carreteras, puentes, viviendas y dejando a gran parte de la población de Rio Grande do Sul sin electricidad ni agua potable.
El cambio climático toca a las puertas del país
Rio Grande do Sul, importante centro agrícola, ya sufrió el año pasado fenómenos climáticos extremos, con raros ciclones extratópicos, que también causaron graves daños, aunque lejos de la magnitud de estos últimos.
Los especialistas en meteorología han asociado la intensidad de estas tormentas con el cambio climático.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó el miércoles, durante un evento de presentación de inversiones en áreas de infraestructura y prevención de desastres naturales, que esta tragedia climática es “una advertencia para el mundo” y “un proyecto de ley que se está aprobando al mundo”. el planeta” a la humanidad.