El 19 de abril de 1999 salió Morante de Puebla por su primera Puerta del Príncipe. Esta tarde se cumplieron 25 años de aquel día. ¿Y por qué no hoy? Fue la última oportunidad de Morante de la Puebla en la Feria de Sevilla. La expectativa era increíble al ver el arte del genio poblano. Había un montón de entradas pero el ganado disipó esa ilusión rápidamente.
el ganado de Alcurrucén Regresó a la Maestranza tras varios años de ausencia. Todos sus animales, de buena presentación, pero de mal juego, imposibilitaron la victoria de los toreros.
Plaza de toros La Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Décimotercer abono y undécimo corrido de la Feria de Abril 2024. Lleno de ‘Sin entradas’. Toros de Alcurrucén,
- MORANTE DE LA PUEBLA, silencio y silencio.
- SEBASTIÁN CASTELLA, ovación tras petición y ovación tras aviso.
- TOMÁS RUFO, silencio y silencio.
Incidencias: El banderillero José Chacón se desmontó tras igualar el segundo.
salió irritante Salida con el aplauso del respetable. Había emoción por ver a Morante en su última tarde. Se le notó en los primeros lanzamientos de salida. Con un traje inspirado en un traje Manolete, el sevillano estiró su capote con Verónica enganchando al toro de frente. El animal se mostró algo esquivo con la capa, algo característico de este rancho, y el de Puebla no pudo terminar el lance.
En banderas volvió a destacar Trabajo Javier. Ha hecho una buena feria en todas sus tardes tanto con la capa como con los palos. Con la muleta poco pudo hacer el poblano. El toro se detuvo muy pronto y no había posibilidades de victoria. Tendríamos que esperar a la última bala.
En el cuarto toro empezó sin probaturas por verónicas del tercero, muy templado y con las manos altas. El público lo apoyó. Remató con una preciosa media.
Con la capa de Trabajo Javier Atacó con mucha clase y ofreció algo de esperanza a los que estaban en juego. El trabajo con la muleta fue largo, más largo de lo esperado siendo Morante. Lo intentó con ambos pitones. La parte más notable de su tarde fueron cuatro naturales y un molinete. Rugió la plaza. El toro no ayudó en nada. Fue por la espada y ahí terminó su feria.
Castella se llevó el mejor lote
Castella apareció en el desfile con el Virgen de la Estrella con su capa de paseo. Tuvo un gran comienzo en el segundo de la tarde. Unas Verónicas muy templadas que siguieron hasta los medios y demostró que sabe pelear muy bien con la capa. El toro, con un excelente trabajo, salió humillando y embistiendo con mucha clase desde el principio.
El fue a caballo de manuel josé bernal galopando y empujando. A partir de ahí desarrolló un galope que transmitía mucho a los jinetes. Alcalá Comenzó los engaños con mucha emoción. José Chacón lo pudo ver en banderillas con un tercio vibrante. Desmontó y recibió el cariño de la afición.
Con la muleta, el francés empezó con doblones para templar la raza del animal. Tuvo algunos problemas al principio. El de Alcurrucén se coló en varias ocasiones. Era una tarea en la que había que dominar al animal. Sebastián lo probó con ambas pitones en las primeras etapas sin atar, pero siempre enseñando al animal. En el cuarto asalto, Castella presionó a Alcalá, y le propinó hasta seis derechazos enlazados con un magnífico cambio de mano que hizo sonar la música. La siguiente ronda se optó por una corrida de toros local. Circulares, pases a la espalda y cambios de mano para finalizar su tarea. Mató con una estocada algo floja. El presidente no hizo caso al pedido del público y recibió una gran ovación del tercero.
El quinto de la tarde, Colorao, fue protestado desde el principio. El animal se detuvo en el cabo de Castella de forma sorprendente. El público pidió la devolución del animal debido a su estado. El francés pidió paciencia con la puesta porque confiaba en que el animal iba a cambiar. Quizás por mansedumbre o falta de coordinación, el animal siguió manteniendo esa característica. El presidente, con razón, no hizo caso de la protesta.
Castella vio cómo el animal atacaba en varias ocasiones la capa del hombre con gran calidad. José Chacón. Había que tener paciencia.
Quedaron solos en la arena; toro y torero. El animal cargó. Castella lo vio rápido y empezó con alto voltaje.: cinco golpes con la mano derecha y un cambio de mano por detrás, el animal se detuvo en seco y el francés aguantó con enorme quietud. La banda de Tejera amenizó la actuación. El animal se detuvo poco a poco. Se agarró mucho al suelo y le costó arrancar durante toda la tarea. Castella siguió insistiendo en los medios atacando al animal. Dejó media estocada y se fue aplaudido.
Tomás Rufo no ha tenido suerte esta feria
Salió el tercer toro de la tarde, un berrendo negro, que provocó aplausos a su salida. Tomás Rufo, en color lila y dorado, inició su segunda presentación en la feria. Recibió el toro por Verónica. En la eliminación de Castella ya demostró que venía con ganas en su segunda tarde: unas chicas muy lentas.
El toro salió frío, al igual que sus hermanos, no cedió ante los embates. En la capa de Sergio Blasco echó la cara a las nubes en varias ocasiones, lo que le dificultaba luchar. El toledano intentó tapar todas las carencias del animal con su muleta plana y cálida. Entregó muletas bellamente diseñadas para ambos pitones. Cambió el terreno y llevó al animal a los medios. Allí cambió las cosas. El toro se detuvo y el trabajo terminó..
Tomás Rufo Traté de despertar la tarde en el sexto.cualquiera. A la salida el animal no hizo nada destacable, frío y suelto al salir. El toledano brindó ante los medios para intentar salvar la celebración. Ni siquiera para esos. El toro duró sólo un asalto con transmisión. El resto es historia. Tomás Rufo intentó una treta con mucho mérito pero no hubo forma de levantarlo. No ha tenido suerte en esta feria. Decepcionante racha en la vuelta de Alcurrucén.