La campaña de vacunación infantil contra la gripeafrontamos estos días una etapa clave para prevenir contagios. Durante el curso 2023-24, entre diciembre y enero, el 75% de los niños que asistieron al Servicio de Urgencias de la Clínica Universidad de Navarra Lo hicieron por síntomas relacionados con la gripe y otras infecciones respiratorias, y en el mismo período se recibió a la mayoría de los hospitalizados por estas manifestaciones. Ante esa realidad, José Manuel MorenoEl director del Departamento de Pediatría, ha destacado la importancia de seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias sobre la vacunación antigripal.
Moreno ha indicado que «la vacuna puede suponer una diferencia vital si un niño coge la gripe, y que la inmunización es necesaria ahora para que los más pequeños puedan afrontar el invierno adecuadamente protegidos», considerando que, además, desde que se vacuna a una persona hasta que genera inmunidad, tarda unas dos o tres semanas. “Cuando el virus de la gripe empieza a circular, es bueno tener la vacuna. Es mejor no esperar hasta que sea demasiado tarde”.
La gripe es una enfermedad infecciosa altamente contagiosa causada por virus que se propagan a través de las secreciones respiratorias y una higiene de manos inadecuada. Aunque la prevención es la opción prioritaria, el pediatra ha asegurado que una El diagnóstico temprano también ayuda a evitar que la infección progrese y genere complicaciones. como neumonía u otitis.
“El sistema inmunológico de los niños y de las personas mayores está más débil. Ambas poblaciones forman parte de grupos de riesgo para estas enfermedades respiratorias, porque tienen menor capacidad de defensa y una especial sensibilidad para atraer infecciones”, explicó.
La recomendación del especialista es vacunar, sobre todo, a niños entre seis meses y cinco años. Según las directrices de la Asociación Española de Vacunología, durante esta etapa de la vida los niños tienen más probabilidades de coger la gripe y contagiar a otros niños y adultos de su entorno. En este contexto, según el director de Pediatría de la Clínica Universidad de Navarra, “la vacuna ha demostrado ser una herramienta eficaz para proteger a toda la población vulnerable”.
Destaca también que «las complicaciones de esta infección respiratoria son más frecuentes en niños menores de cinco años y, especialmente, entre los menores de dos, por lo que representan un grupo que debe ser protegido con antelación».
LA PREVENCIÓN, UNA TAREA DIARIA
Los síntomas más comunes de un cuadro clínico gripal son la aparición repentina de fiebre, dolores de cabeza, dolores musculares y malestar general. A veces se producen dificultades respiratorias o gastrointestinales. Además, en los niños más pequeños puede aparecer apnea del sueño o reticencia a comer.
Más allá de la vacuna, para evitar complicaciones del virus entre la población pediátrica, José Manuel Moreno ha recomendado el lavado de manos, una buena alimentación e hidratación y evitar ambientes demasiado cerrados y con mucha gente. “No es bueno que los niños estén en lugares donde hay demasiada gente durante este periodo, más allá de las guarderías o los colegios. Ante los primeros síntomas, es bueno que no vayan a la escuela y se queden en casa, por ellos y por los demás”, añadió el pediatra.