El presidente de IberdrolaIgnacio Sánchez Galán, ha advertido de que la solución a la competitividad en Europa «no puede pasar por el gas», al tiempo que ha defendido el carácter «crucial» de la energía nuclear sostener la demanda y responder a nuevos usos de la electricidad en un momento en el que El impulso hacia el hidrógeno verde parece haberse desacelerado.
En su intervención en un panel del Foro Económico Mundial, en la localidad suiza de Davos, el ejecutivo español ha sido de apoyo que aquellos países que estén en condiciones de realizar la inversión puedan construir nuevas centrales nuclearesmientras que donde hay plantas en funcionamiento sería necesario mantenerlas. «No sé si ha llegado el momento de construir una nueva (central nuclear) o no», afirmó Galán en presencia, entre otros, del comisario europeo de Clima, Wopke Hoekstra, y del director general del grupo francés Engie. , Catherine MacGregor, añadiendo que países como Francia «pueden hacerlo» e invertir.
En este sentido, el presidente de Iberdrola ha defendido que «al menos aquellas que hoy tienen centrales nucleares en funcionamiento, que hemos demostrado que son seguras y eficientes, Son absolutamente necesarios para mantener las luces encendidas. en un momento en el que aparece cierta demanda, como es el caso de los centros de datos, que requieren 24 horas al día, siete días a la semana.
Durante el coloquio, Galán destacó la importancia de que Europa aborde cómo ser más autónoma en cuanto a sus fuentes energéticas, ya que no tiene gasolinao solo un poco, ni aceiteo solo un ratito mientras el viento esté disponibleenergía hidroeléctrica y nuclear. En este sentido, el Ejecutivo español cree que esta mayor autonomía energética dotará a la UE de mayor competitividad, aunque ha advertido de que la solución en este sentido para Europa «no puede venir del gas».
Por otra parte, señaló al comisario europeo la sensación de que «El impulso del hidrógeno ya se ha desacelerado» cuando las empresas estaban dispuestas a hacer inversiones y tenían muchos proyectos. «La sensación es que empezamos a poner diferentes colores, hoy verde, gris, azul, rosa… Demasiados colores. Es una pena, porque creo que Es otra forma de reducir la dependencia externa«, señaló.
De este modo, Galán ha lamentado que, Aunque Europa tomó la bandera de la economía verde, está detrás de aquellos que tradicionalmente venimos criticando porque eran los más contaminantes, como China, donde casi el 30% de su economía está electrificadapor delante de Europa. «Podemos electrificarnos fácilmente. Ser más eficiente significa menos costes. Así que creo que esas son las cosas que tenemos que hacer», afirmó el español, para quien es fundamental dar impulso a las diferentes soluciones ahora.